1/2/11

Si es cuestión de confesar realmente lo que pienso, no pensé jamás que llegaría el último beso ni verte marchar de la manera en que lo hiciste. Si pensabas irte, ¿para qué coño volviste? Vayas donde vayas, te mandaré mis fuerzas. Aunque me fallarás, juro no tenerlo en cuenta. El corazón perdona en medida de lo que ama, y tú te preguntas si existirá algo más. Hoy le he dicho al mundo que juntos creamos, mil excusas por las cuales ya no nos soñamos. Persigo tus huellas aunque a veces me haga daño. Te daré mis fuerzas, aunque desprecies mi mano. Personas así, dicen que es mejor olvidar. Pero antes de irme quiero que te quede claro, dudo que algún día te amen como yo te he amado. Separa los límites de los tiempos pasados, puede que mañana incluso me hayas olvidado.