30/3/10

Mirando al campo, se olvidó del hombre.
Mirando al rico, se vistió de pobre,
para poder saber lo que chusmeaban las vecinas.
En su cabeza lleva una bandera.
Ella no quiere ser como cualquiera.
Ella adora mostrar la paja de la cara ajena.
Y dentro de su cuento, ella era cenicienta.
Su príncipe, era un hippie de los años sesenta.
Te amo, te odio, dame más.